Análisis de valor
Técnica que permite determinar que partes del proceso generan valor y cuáles están sujetas a reingeniería
- Actividades que generan valor
- Actividades que generan valor al negocio
Las que son necesarias y útiles para el proceso
- Actividades que no generan valor
El valor añadido es uno de los elementos más importantes que una empresa tiene que definir dentro de su estrategia operativa. Más que importante es crítico, ya que, el valor añadido es el elemento que puede conseguir que un cliente se decante por los productos de nuestra empresa o por los de la competencia.
Detrás de cada uno de los productos existe una organización. Y éstas son tan eficientes y eficaces como lo son sus procesos. La mayoría está tomando conciencia, planteándose la mejora de los procesos para reducir algunos males habituales como: bajo rendimiento de los procesos, barreras departamentales, subprocesos inútiles debido a la falta de visión global, excesivas inspecciones, redundancia de procesos, etc...
Las organizaciones adoptan una gestión por procesos para mejorar la calidad de sus actividades y gestionarse de forma más eficiente. Pero, ¿qué pasa cuando un proceso no aporta un valor añadido? ¿Puede suceder que un proceso que en principio se creía beneficioso para la organización, no aporte ningún valor? La respuesta es sí. No todos los procesos que se establecen dan beneficios a la compañía o resultan eficientes.
Cuando se detecta un proceso que no resulta beneficioso para la organización o necesita una mejora se lleva a cabo lo que se denomina una reingeniería del proceso. El objetivo es mejorar drásticamente la productividad y preparar a la organización para competir en entornos turbulentos.
¿Por qué se requiere implementar un procesos de reingeniería?¿Porque hoy las empresas funcionan mal por las mismas causas por las que funcionaban bien en el pasado.?